miércoles, 11 de enero de 2012

Mi llamada del Señor






Soy la hermana Alicia María del Espíritu Santo del Carmelo de León, y fui una de las chicas que hicieron la primera Ruta Monástica de esta Diócesis de León en el año 2008 en el Monasterio de las Benedictinas.

En el momento en el que yo hice la Ruta Monástica todavía no tenía definida mi vocación a la vida contemplativa, ni siquiera a la vida religiosa pues desconocía hasta la diferencia que hay entre la vida activa y la contemplativa, pero si que estaba viviendo un momento de interrogante en mi vida, de hecho la primera vez que hablé con mi director espiritual mi pregunta fue – no se cuál es el sueño que tiene Dios de mi –, así, tal cual.

En ese tiempo de discernimiento, providencialmente una amiga me invitó a hacer esta Ruta Monástica y animada por mi director espiritual realicé esta experiencia. Nada tenía que perder, conocer las cosas ayuda a resolver.

Así esta experiencia de la Ruta Monástica fue, y es, una gran oportunidad en muchos sentidos: en los tiempos de reflexión pude ahondar en lo que es esta vocación, en la visita a cada monasterio, tuve la oportunidad de preguntar y desmitificar todas esas dudas que se tienen sobre esta vida, ver y conocer a las hermanas de cada comunidad con su experiencia de vida, hablar con ellas, y con el resto de chicas que hicieron la Ruta, pude compartir muchas cosas, un mismo sentir, buscar y ¡hasta un mismo dudar!.

Y fue en la Ruta Monástica donde descubrí mi llamada a la vida contemplativa, posteriormente realicé la experiencia en el Carmelo de León donde me he sentido atraída por su carisma que se confirmó en el tiempo de ésta y meses después inicié el postulantado y si Dios quiere el próximo mes de febrero haré la Profesión de Votos Temporales.

Doy gracias a Dios por el don de la vocación que me ha regalado, estoy feliz en este camino de seguimiento de Cristo en el Carmelo, Él llena plenamente mi vida y estoy segura de que en comunión de vida con Él mi vida desde el silencio y la soledad, es fecunda para la Iglesia y para todos los hombres.

Animo a todas las jóvenes que se sienten atraídas a la vida consagrada que como María pronuncien su “Hágase” y no se arrepentirán de haberse “Entregado al Amor”.

Siempre unida en Cristo y María.

2 comentarios:

  1. ¿Que quiere decir consagrarse al Señor?

    ¿Y como saber que estoy capacitada o tengo la madurez suficiente para ello? ¿La edad no importa, o sea si soy demasiado jóven?

    ¿Tiene monjas jóvenes en sus monasterio?

    Me haría mucha ilusión poder hablar con ellas.

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  2. Para saber si hay una llamada del Señor hay que ponerse en camino en un proceso de discernimiento con una persona experimentada que acompañe. La edad no importa, Dios llama cuando quiere. En algunos de los monasterios de la Ruta hay gente joven, pero lo que es más importante es que hay en todos monjas mayores que con su sabiduría, testimonio de perseverancia y ejemplo nos sostienen a las más jóvenes. Si de verdad te hace ilusión hablar con monjas puedes hacer la Ruta y satisfacer este deseo tuyo. Ánimo. Un abrazo fuerte

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